Hugo Chávez Frías
Presidente de la República Bolivariana de Venezuela
Aeropuerto Internacional Simón Bolívar
Caracas, viernes 11 de mayo de 2012
Presidente Chávez: Querido, amado pueblo venezolano; señor vicepresidente Elías Jaua, señores ministros, ministras del Gabinete Ejecutivo; señores generales, almirantes del Alto Mando Militar, oficiales, suboficiales, tropa de la Fuerza Armada Bolivariana, músicos militares, periodistas, hombres y mujeres de la Patria. Viernes 11 de mayo, llegamos a tiempo para conmemorar, para celebrar con mucha alegría el Día de la Madre el próximo domingo. La madre, mamá Elena mándame la bendición, como siempre.
A todas las madres, las abuelas, y a la gran madre, a la Patria madre.
Desde ahora, desde ahora mismo venía pensando en eso, felicitaciones a la madre, a las madres; y vaya que merecen un reconocimiento especial las madres de Venezuela y las madres del mundo. Llegamos a tiempo pues, viernes... ¿Qué hora es aquí ya, Elías?
Elías Jaua: Diez de la noche (10:00 pm).
Presidente Chávez: Diez de la noche (10:00 pm).
Un viaje rápido, con el equipo más cercano de trabajo, el canciller Nicolás, quien venía de Egipto; la Casa Militar, el equipo médico. Veníamos conversando algunos temas con el canciller, y debo manifestar en primer lugar, queridos camaradas, compatriotas, pues la profunda alegría que siento en el corazón, en el alma, al estar de nuevo (después de estos días) en tierra venezolana; en la tierra que nos parió, en la madre Patria. Alguien diría: la “matria”, la “matria”. La Patria madre, la madre Patria.
Y he estado, por supuesto, ustedes lo saben, al tanto día tras día de los aconteceres, de la marcha del país, y también del ámbito internacional, pero sobre todo de los aconteceres y la marcha nacional, y yo quiero en primer lugar felicitarles, reconocerles y felicitarles al pueblo todo, a los sectores todos de la vida nacional, por la dinámica que sigue llevando el país, la dinámica positiva, aunque algunos siguen y seguirán insistiendo en negarlo, esa es su tarea seguramente en este tiempo que les ha tocado vivir.
Pero es evidente la marcha positiva, el avance en los distintos frentes de batalla, en lo social, he estado muy pendiente de los avances en la dinámica social; la organización popular, el Poder Popular, las misiones, las grandes misiones, el desarrollo social integral, la educación, la salud, los programas, los distintos programas, y especialmente las grandes misiones: en Amor Mayor, Hijos e Hijas de Venezuela, Saber y Trabajo Venezuela; la Gran Misión Vivienda Venezuela, Mi casa bien equipada, estuve viendo que abrieron una jornada especial en honor a las madres, desde el día de ayer allá en Los Próceres; la entrega de vivienda de ayer, extraordinaria, como todos los jueves, Jueves de Vivienda.
Estaba viendo hoy también la instalación del Comando Carabobo en el estado Táchira, en San Cristóbal. Un acto esta tarde, poco antes de salir de La Habana, de las mujeres en honor a las madres.
En fin, la dinámica social, el desarrollo social integral reconocido en el mundo entero de la Revolución Bolivariana.
Por eso decía, quiero felicitarles una vez más, y quiero hacer un reconocimiento especial a nuestro vicepresidente camarada, el compañero Elías Jaua Milano. Para él un especial reconocimiento, Elías.
—Aplausos.
Por el gran esfuerzo, por el gran trabajo. A veces lo llamo y le digo: “¡Descansa, Elías! Descansa un poco”. Por lo veo por aquí, lo veo por allá, lo veo de noche, lo veo de día, lo veo sábado, domingo; y de todos los ministros y ministras, sin excepción; gobernadores bolivarianos. Felicito al gobernador García Carneiro, porque vi que fue electo por los gobernadores como miembro al Consejo de Estado que se está formando bajo la presidencia del vicepresidente Elías Jaua.
A todos, en fin, a todos mis palabras de reconocimiento, de reconocimiento.
¡La economía! Estuve hablando anoche con el doctor Nelson Merentes, el doctor Giordani, revisando el tema de la inflación, sigue bajando; y el crecimiento económico del primer trimestre va a ser muy bueno, no tenemos todavía la cifras definitivas, ni me corresponde a mí anunciarlo, si no pues al Banco Central de Venezuela. Pero, por las conversaciones que he sostenido, tengo esa información de que el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) del primer trimestre va a ser muy, muy bueno. Y sobre todo si lo comparamos con lo que está ocurriendo en el mundo, que impacta también a la América Latina, al Caribe. La economía, el desarrollo económico.
¡La implantación del socialismo! En eso seguiré insistiendo siempre, la transición hacia el socialismo, que requiere cada día una mayor suma de justicia social, de igualdad; pero al mismo tiempo la construcción de las bases materiales del socialismo. Allá donde están las empresas de propiedad social directa, las empresas comunales, las empresas de propiedad social indirecta; desde las más pequeñas hasta las más grandes, como Petróleos de Venezuela, las cementeras, la petroquímica. En fin, es la construcción del socialismo en lo espiritual, en lo social, en lo cultural, y por supuesto también en lo económico.
Ayer estuve conversando un rato con el compañero y camarada Fidel sobre estos temas. Esta tarde conversé con Raúl en el aeropuerto, quien fue muy gentilmente a despedirnos. Me han agradecido que le transmita al pueblo venezolano, a la Patria venezolana, su saludo de siempre, su solidaridad de siempre. Y yo desde aquí, junto a todos ustedes y a todas ustedes, quiero agradecerle a Fidel, a Raúl y a Cuba toda su solidaridad, sus atenciones, su generosidad para con todos nosotros, y de manera especial para conmigo en estos días que estamos transitando.
Desde ese punto de vista, por cierto, he estado pendiente, por supuesto, de las permanentes especulaciones de algunos individuos, algunos sectores que lanzan cualquier cantidad de rumores sobre mi estado de salud. Debo informar que en estos últimos días hemos concluido de manera exitosa todo el ciclo de la radioterapia, tal cual estaba planificado por el equipo médico.
—Aplausos.
Más allá de algunas molestias, muy normales en este tipo de tratamiento, no ocurrió absolutamente nada que obligara a detenerlo, a suspenderlo o a alterar el plan inicial. Tal cual se completó plenamente.
Y ahora, pues, yo vengo y venimos con un gran optimismo de que este tratamiento surta los efectos que aspiramos, y siempre pidiendo al Altísimo, a Dios nuestro Señor, a Cristo Redentor, para que ayude, nos ayude, a seguirnos más bien el milagro de la vida para seguir sirviendo precisamente al mandato de Dios, al mandato de Cristo, a la redención de los humildes, para seguir junto a ustedes construyendo la Patria nueva, la Patria buena, la Patria socialista, la Patria venezolana.
Debo, por supuesto, ahora en esta fase de los próximos días, seguir rigurosamente las indicaciones médicas para continuar recuperándome de los efectos normales esperados del tratamiento pleno de la radioterapia. Pero en la medida que pasen las horas y los próximos días, pues, estoy seguro, con el favor de Dios y de la ciencia médica, y de este cuerpo de soldado en el que ando, que iré progresivamente instalándome donde debo estar, en la primera línea de la batalla, junto al pueblo bolivariano, impulsando la Revolución socialista, la Revolución de la paz, la Revolución del amor, la Revolución social, la Revolución cultural.
Por otra parte he estado pendiente también de la adelantada campaña electoral de la oposición, porque sin duda que la oposición venezolana, la derecha venezolana arrancó en campaña hace rato largo, yo creo que desde el año pasado; yo he estado mirándolos, observándolos. Sigo viendo cómo se fortalece la Revolución Bolivariana, sigo viendo cómo se fortalecen los movimientos sociales, sigo viendo como se fortalece el gran Partido Socialista Unido de Venezuela, sigo viendo y sintiendo cómo se fortalece el Gran Polo Patriótico. Es decir, el huracán bolivariano se sigue y se seguirá fortaleciendo.
—Aplausos.
Y debemos seguir impulsando ese fortalecimiento, esa organización política, social, cultural, en todos los estratos, en todos los niveles, en todos los espacios. Es una tarea de todos los días.
Quiero también hacer un reconocimiento, pues, al Comando de Campaña Carabobo, al doctor Jorge Rodríguez, a quien le he encomendado esa tarea. Y a todos los comandos estadales, regionales, municipales. Al Gran Polo Patriótico y sus más diversas corrientes.
También hay que seguir dando la batalla de las ideas, y seguir trabajando el proyecto, el programa, el Proyecto Nacional Simón Bolívar, para el próximo ciclo 2013-2019, en su ámbito económico, político, social, territorial, nacional, internacional. Es una tarea que debemos seguirla asumiendo como el pueblo la ha venido asumiendo, como el partido y los partidos aliados la han venido asumiendo.
Lamentablemente la derecha parece agotada, así la veo, desesperada. Como esos boxeadores agotados que lanzan golpes y salen a lanzar golpes al vacío, pero desesperados y tienen por detrás una mandarria escondida, o una navaja, qué sé yo cualquier cosa. Hay que tener cuidado con las manifestaciones que ya comienzan a verse al respecto, y de lo cual venimos alertando, una oposición sin liderazgo, sin pies ni cabeza, sin una lógica, sin un proyecto propio, sin un horizonte está entrando en desespero y están tratando de generar hechos violentos. Lo anuncian incluso algunos de sus dirigentes. Están viajando por algunas partes del mundo tratando de articular una especie de eje anti-Venezuela o contra Venezuela. No les perdamos la vista.
De todos modos si a nivel internacional queremos referirnos, allí también se van a estrellar, porque hay que ver el respeto que Venezuela ha adquirido a nivel mundial, hay que ver el papel que Venezuela juega en Suramérica en la Unasur, hay que ver el respeto que Venezuela tiene en la Comunidad de Estados de Latinoamérica y el Caribe, en todo lo que es Caricom y el Caribe, Petrocaribe, Centroamérica; hay que ver el papel que Venezuela está jugando a nivel mundial.
Bueno, el canciller Nicolás Maduro podrá explicarlo. En Egipto, en la Cumbre de los Países No Alineados, ¡120 países!, todos levantaron la mano apoyando a Venezuela, o apoyando mejor dicho la propuesta para que la cumbre, la próxima cumbre presidencial de los Países No Alineados se realice, como se realizará, aquí en Caracas el año 2015.
—Aplausos.
Por eso digo que el majunchismo también se estrellará a nivel internacional. Como aquí se ha estrellado contra una realidad.
De todos modos como Jefe de Estado no está de más que yo siga haciendo el llamado a los sectores racionales de la oposición venezolana, a que respeten la Constitución, a que respeten las leyes, a que respeten al pueblo, a que respeten a sus mismos seguidores, que los tienen, y ahí tienen gobernaciones, tienen alcaldías, tienen una bancada en la Asamblea Nacional, tienen un espacio, tienen empresas privadas, bancos, negocios. Bueno, piensen en eso, piensen en eso de manera racional y no se dejen llevar por los que andan desesperados, por el majunchismo desesperado. Que nadie se deje llevar por aquellos que pretenden conducir a nuestra amada Patria por los caminos de la violencia.
Estaba viendo también los programas y los análisis, acerca del caso aquel terrible de la importación de paramilitares hace ocho años. Vi a García Carneiro, que era ministro de Defensa en esos días, que estaba haciendo una explicación en algún programa de televisión. Al general Rodríguez Torres, con José Vicente Rangel. Bueno, Rodríguez Torres era coronel en ese tiempo y estaba en la Disip, y fue uno de los encargados de la operación, impecable operación. Recuerdo que era el Día de la Madre, recuerdo que era el Día de la Madre y estábamos esperando algo para ese día, la información corría muy duro. Y era eso, paramilitares importados para venir a sembrar el terror en Venezuela. ¡Dios mío! Que eso lo hagan venezolanos, esos no son venezolanos. A lo mejor nacieron aquí, pero no tienen el corazón en Venezuela. Porque uno para la Patria quiere lo mejor, como para la madre, como para los hijos, para las hijas. ¡La Patria! Esta Patria seguirá por el camino de la paz, del desarrollo integral, de la democracia verdadera, del socialismo, de la igualdad, de la felicidad, de la suprema felicidad social. De la más alta suma de estabilidad política, la más alta suma de seguridad social, y la más alta suma de felicidad posible.
Ese es el camino que Dios le ha señalado a esta Patria, y es el camino que el pueblo venezolano, hoy despierto de nuevo, bravío y sabio, le ha indicado, le ha venido construyendo a la Patria de nuestros padres, de nuestras madres; a la Patria de nuestros hijos, a la Patria de nuestras hijas.
Bien, no quiero alargar estas palabras —Elías, señores ministros, ministras, compañeros, compañeras—, viernes por la noche, feliz fin de semana, a descansar un poco y a celebrar el Día de la Madre, pues, de la madre, la madre; mamá Elena bendición, y las madres, y la gran madre.
Provoca cantarle a las madres la canción de la gran madre:
[canta] Llevo tu luz y tu aroma en mi piel
y el cuatro en el corazón
llevo en mi sangre la espuma del mar
y tu horizonte en mis ojos...
No envidio el vuelo ni el nido al turpial
soy como el viento en la mies
siento al Caribe como una mujer
soy así que voy a hacer...
¡Viva Venezuela!
—¡Viva!
¡Viva la madre! Buenas noches, compañeros; buenas noches, compañeras.
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