Un día sí y otro también, vemos o escuchamos como los PROFESIONALES de la comunicación utilizan los medios de comunicación de masas para generar zozobra desde su "legalizada impunidad" de arrinconar la libertad de expresión a un subterfugio de la libre empresa comunicacional a la cual responden. NO debe llamar a asombrar expresiones como "ilegales", "usurpación de funciones", entre otras categorizaciones que no hacen más que delimitar las fronteras que los "iluminados" de la comunicación se abrogan para con la generalidad de hombres y mujeres, que, sin ser PERIODISTAS ejercen su derecho humano de comunicar; y sí, tomamos una cámara, abrimos un micrófono, redactamos nuestras convicciones y los sueños de nuestras comunidades, precisamente para visibilizar lo que los MASS MEDIA usurpan, acaparan e invisibilizan desde sus periódicos, radios, televisoras y portales web.
Es asombroso como un grupo de "colegiados" pretende dar cátedra de moral y decir que van a exigir el respeto de las leyes sobre la comunicación, cuando son los primeros en violarlas en tanto y en cuanto ejercen sus funciones en el mayor de los casos sobre las premisas de una EMPRESA COMUNICACIONAL que delinea y condiciona la línea editorial que deben seguir los "profesionales" a su mando, ante lo cual cualquier otro interés que no represente los satisfactorios para la EMPRESA no serán tenidos en cuenta, y en caso de lograr evadir a los "consejos editores" de los medios, están propensos a las represalias acordes a su falta de ETICA para con el medio, sin importar la priorización del interés social de informar. No asombra, decimos por que la historia venezolana y del continente todo, está plagado de estas manifestaciones altisonantes, que buscan dictar cátedra sobre las formas y maneras de la utilización de los medios, desconociendo u obviando la formas y la manera en que los medios utilizan a los periodistas "legales" para fomentar, promover, sostener, defender y pactar con innúmeras prácticas que rozan lo criminal.
Por ejemplo, el "mira como disparan a una manifestación indefensa" del 2002, cuando al parcializar el ángulo de la información se logró tergiversar la comunicación por tanto la percepción sobre la realidad que se presumía estar narrando, o cuando los grandes medios transnacionales con sus oficinas secuaces en Latinoamérica avalaron el discurso Bush de las armas de destrucción masiva en Irak que llevó al planeta a una nueva escalada de violencia que recrudeció desde entonces y que ha fomentado la oxigenación de un sector belicista norteamericano sobre el costo de millones de vidas. Y ahora nos dicen que hay "ilegales" "usurpando la comunicación".
Parece ser como que en los CNP no hay espejos o es que pasan por ellos sin mirar más allá que sus retocados maquillajes o sus nuevos look recién reacondicionados para ensayar nuevas estrategias de marketing comunicacional que puedan sostener a SU empresa, de la cual no cuenta con el mínimo dividendo.
Es paradójico que se intente, aunque sin decirlo, silenciar a una masa de medios comunitarios, alternativos - "ilegales" para las señoras y los señores del CNP, que entienden más prudente y prioritario abrir sus instalaciones para frondosas fiestas particulares que para instancias de debate y organización sobre la comunicación que necesita el pueblo para deslastrarse de rémoras comunicacionales que se pegan desde los empresarios de la comunicación a la explotación de un espectro público para desarrollar intereses privados y mercantilistas, para luego salir a defender la libertad de empresa, cuando la materia prima le pertenece justamente a quienes luego excluyen y criminalizan.
Es lógico entender que en una sociedad positivista y altamente especializada, se desarrollen y consoliden espacios de formación académica que reproduzcan la elitización de la sociedad, todo lo cual desnuda sus claras intenciones de SUPERACION SOCIAL que no es otra cosa que deslindarse de las clases populares, como si lacran fueran y por tanto se torna indeseable o incluso criminal tolerar la presencia de comunicadores populares en los pasillos y salones de sus filiales del CNP como no hace mucho fuimos testigos del destrato al propio hermano de Romero Anselmi en la capital tachirense, cuando en una lluviosa tarde de sábado se pretendía reunir con un grupo de hombres y mujeres "ilegales" que planeaban el criminal delito de COMUNICADOR con dignidad la verdad del pueblo, mediante la consolidación de un proyecto, que, mal que les pese, va y avanza y será capaz, junto con otros cientos y miles de proyectos comunicacionales nacidos desde la CRIMININAL e ILEGAL -para ellos- necesidad de los pueblos de organizarse para desmontar todas y cada una de las mentiras paridas en los laboratorios de la LEGALIDAD BURGUESA guardada a cuatro llaves en los inexpugnables recintos de las filiales del CNP a lo largo y ancho de la geografía nacional. Para estos señores y estas señoras, es LEGAL el atropello moral a que cotidianamente somete Venevisión, La Tele, Globovisión y la extinta RCTV con sus programas chatarra, con sus realitys amorales, estereotipantes, chauvinistas, denigrantes del valor moral del ser latino, sexistas, machistas y banales; esa es la legalidad que defiende el CNP
Pues sépanlo, esa legalidad no nos representa, nos indigna, nos mueve a la organización y a la lucha, a la verdadera formación popular, lejos del academicismo burgués, acartonado y alienado de sus universidades distorsionantes del sentido de pertenencia nacional y de pertinencia social de los medios de comunicación. O es que acaso creen que la violencia, la xenofobia, la discriminación y la opresión que viven nuestras sociedades son gratuitas?, es que tampoco van a asumir su cuota parte de responsabilidad cuando desde sus micrófonos, con sus cámaras, programas y redes sociales dinamitan todo y cualquier proceso de transformación social y elevación moral de los pueblos de nuestro continente? Asuman su lucha pues, que nosotros radicalizaremos la nuestra. Hasta la victoria siempre, patria, socialismo y comunicación libre, venceremos.
Prensa YVKE
0 Comentarios:
Publicar un comentario