Con ocho ponencias se inició este jueves, en las instalaciones de la Aldea Universitaria de Misión Sucre “Cárcel Nacional de Maracaibo”, en Maracaibo, estado Zulia, la “I Jornada de Educación Penitenciaria Universitaria Región Occidental y Andina”, dirigida a investigadores, docentes, estudiantes y población en general.
Entre la temática expuesta estuvo el “Tratamiento Penitenciario”, a cargo de Marianli Díaz, delegada de prueba de la Dirección Nacional de Asistencia Pospenitenciaria; “Educación penitenciaria y participación ciudadana”, dictada por el docente Edinson Sánchez; “Inserción social como producto del trabajo educativo universitario”, ofrecida por la profesional del Derecho y docente de Misión Sucre, Wendy Flores y “Proyecto de cárceles abiertas como granjas agrícolas”, en la voz del estudiante de Misión Sucre, Zacarías Báez, entre otras.
Al respecto, la coordinadora de la Aldea Universitaria, Nancy Torres, señaló que esta actividad nace debido a los antecedentes que se han venido creando de la evaluación de lo que es el proyecto de este espacio educativo dentro de la Cárcel Nacional de Maracaibo. “Todas estas teorías relacionadas a la educación universitaria en el sistema penitenciario en Venezuela vienen siendo recogidas en el Doctorado en Ciencias Pedagógicas que me encuentro realizando bajo el Convenio Cuba-Venezuela”.
“Estamos haciendo todo un trabajo para organizar académicamente la educación universitaria en los distintos institutos penitenciarios (…) esto ha permitido sistematizar todas las experiencias desde cuando los privados de libertad se incorporaron a la educación universitaria, a través de la educación municipalizada como lo es la Misión Sucre, hasta lo ocurrido en estas jornadas de Educación Penitenciaria Universitaria”.
La Aldea Universitaria “Cárcel Nacional de Maracaibo” es la primera registrada por ante el Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria (Mppeu). Ha graduado a diez (10) privados de libertad (2 aún se encuentran cumpliendo pena). “Esto demuestra que se están viendo los frutos, pero tenemos que seguir trabajando en unificar criterios de enseñanza de la educación universitaria en los centros penitenciarios en todo el país”, recalcó la coordinadora.
Ante la pregunta de cuál ha sido el avance, Torres comentó: “Si bien hemos dado unos significativos frutos, estamos prácticamente comenzando (…). Sin embargo, esperamos que esta I Jornada nos encamine para realizar en los próximos meses el I Congreso Nacional de Educación Penitenciaria Universitaria, donde cada uno de los 36 institutos penitenciarios que hay en el país nos reconozcamos y unifiquemos nuestro método de enseñanza para seguir trabajando con la población privada de libertad”.
Testimonios
Mar Jiménez, psicopedagoga, destacó la importancia del evento debido a que “se fomenta lo que es la educación (…) enseñar para enseñar es y debe ser lo más destacado en todos los sistemas educativos. Esta actividad permite contribuir con tu granito de arena en beneficio de las y los privados de libertad para así impulsar la verdadera reinserción social de esta población, que es lo que se busca”.
“Estoy cien por ciento segura de que aquellas personas que han cometido un delito pueden reinsertarse completamente a la sociedad. Soy testigo de ello, porque trabajo en eso en la Guajira en un centro de mujeres. Es muy distinto ver en el estado en que entran y en el que salen en libertad; lo que se necesita es contar con gente con mística y vocación de trabajo, que tenga fe porque sí se puede lograr”.
Asimismo, María Soto, facilitadora pedagoga de la Entidad de Atención La Guajira (antiguo albergue), destacó la necesidad de que estas actividades se realicen con mayor frecuencia para poder lograr los objetivos trazados. “Necesitamos sensibilizar a todas y todos los venezolanos para lograr uno de nuestros fines que es dar educación a toda la población privada de libertad, porque brindándole esa oportunidad ellos pueden reinsertarse de manera más concreta a la sociedad y andar un camino más seguro y sin posibilidad de reincidir”.
Finalmente, Roxana Estrada, docente de la Aldea Universitaria “Cárcel Nacional de Maracaibo”, subrayó la importancia que ha tenido esta jornada para la comunidad universitaria y en general, porque, a través de la Misión Sucre, las y los privados de libertad gozan de la posibilidad real de reinsertarse socialmente.
Al respecto, confesó que para ello falta mucho camino por andar, “pero esta es la lucha, el propósito de llegar hasta donde queramos; por ello, esperamos el apoyo del Gobierno Bolivariano por medio del Ministerio del Poder Popular para el Servicio Penitenciario para que todo el sistema se humanice y que, a su vez, las y los privados de libertad puedan asistir a su preparación académica con las condiciones óptimas y de manera más fácil”.
Prensa MPPEU
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