Hace más de 500 años, importantes luchadores indígenas defendieron sus tierras y sus culturas frente a los "conquistadores". Se les llamó jefes, guerreros o caciques. Rigoberta Menchú, líder originaria guatemalteca, Premio Nobel de la Paz, ha señalado: "Los pueblos indígenas hemos podido ocultar nuestra identidad porque hemos sabido resistir".
Todos fueron testigos de la hazaña "sangrienta" que emprendieron quienes se hicieron llamar "conquistadores", otros empeñados en la idea del "descubrimiento" o de "civilizar" al "incivilizado".
"Tenemos que seguir luchando hasta el último sopolo de vida para dejarle un legado a las generaciones futuras", era una máxima de Reina Rodríguez, luchadora por el reconocimiento de las mujeres indígenas de la comunidad Monte Cristo de Kumarakapay, estado Bolívar, que partió de esta tierra en 2009.
A defender con honor las tierras, arrebatadas por el invasor, era uno de los clamores de Urquía, guerrera cacica, quien promovió junto a su esposo, el cacique Guaicaipuro, la resistencia indígena.
Ana Soto, originaria larense, se mantuvo al frente de los indígenas perseguidos, humillados, robados y despojados de sus tierras en Baquisimeto, El Tocuyo y Carora.
La belleza de la india Upata, al igual que del resto de las mujeres de su raza fue la causa del asedio que sufrió por parte de los españoles y Apacuana, valiente de la población Quiriquires, en Los Valles del Tuy, fue trasladada al territorio que ocupaba su tribu en Cúa y después de ser flagelada murió ahorcada; para justificar su asesinato, los españoles la acusaron de bruja en vista de que este "delito" era castigado por la Inquisición con la pena de muerte cruel.
A esta lista de heroínas se suman hérores ancestrales que comparten honores con Guacaipuro: Mocotíe, Cayaurima, Catia, Guaicamacuto, Paramacay, Paramacone, Paisana, Naiguatá, Maracay, Terepaima, Yaracuy, Yare, Yoraco, Socoraima, Manaure y Tiuna, Chacao, Baruta, entre muchos otros.
No se celebra, se conmemora
El líder supremo de la Revolución Bolivariana, Hugo Chávez, decretó el 12 de octubre de 2002 la no celebración del otrora Día de la Raza y la instauración del Día de la Resistencia Indígena, mediente decreto presidencial Nº 2028, publicado en la Gaceta Oficial extraordinaria Nº 5615, del 10 de octubre de ese año. Esto significó un reconocimiento a la constante lucha por su dignidad, diversidad cultural y humana de los pueblos originarios de América.
A esta efeméride se le dio la denominación de "Día de la Raza", por el ex-ministro español Faustino Rodríguez-San Pedro, como presidente de la Unión Iberoamericana, que en 1913 pensó en una celebración que uniese a España e Iberoamérica y eligió para ello el 12 de octubre. En Venezuela, el "Día de la Raza" fue decretado en 1921 por el dictador Juan Vicente Gómez.
Lo cierto es que el 12 de octubre rememora la llegada de Cristóbal Colón a costas americanas en 1492 y el inicio de una masacre y un proceso transculturizador. Fuentes históricas refieren que el navegante llegó con la convicción de que había arribado a la India, por lo que no implicó un "descubrimiento" de estas tierras que además ya estaban habitadas.
El arribo de los europeos estuvo acompañado de la implementación de la religión o creencia cristiana como instrumento opresor durante la llamada "conquista", que implicó el exterminio de extensas civilizaciones, por esta razón el 12 de octubre no es fecha para celebrar, sino para conmemorar.
Por su parte, la ministra para los Pueblos Indígenas, Aloha Núñez, recordó que: "Antes éramos considerados como animales, no éramos considerados ciudadanos, ni parte de la sociedad. Pero la Constitución del 99 incorporó los derechos de los pueblos indígenas y a partir de allí comenzamos a ser visibilizados".
La ministra refirió que están identificadas más de 3.000 comunidades originarias en el país y aproximadamente 725.000 habitantes ancestrales, según el censo 2011, además son 40 pueblos indígenas identificados hasta el momento.
Ser indígena, raíz histórica común de Venezuela
A 11 años de haber sido declarado en Venezuela por el comandante eterno el 12 de octubre como Día de la Resistencia Indígena, los pueblos originarios deben pasar a la avanzada hacia el concepto del venezolano indígena, convertir el término indígena en colectivo del pueblo venezolano.
César Sanguinetti, presidente del Parlamento Indígena de América, Grupo Parlamentario Venezolano (PIA-GPV), sostiene: "Creo que como indígenas, ya que estamos blindando los mecanismos de preservación de nuestra identidad y de nuestra cultura, debemos insistir en que nuestra raíz histórica común de Venezuela no es Europa, Estados Unidos o Inglaterra, es una raíz originaria y para ello debemos avanzar en una legislación que no solamente arrope a los pueblos ancestrales, sino hacia la contextualización nacional, que ese término no sea exclusivo de un grupo que hable un idioma determinado, sino para todos, de manera que el venezolano se sienta orgulloso de ser indígena".
Para Sanguinetti, existe la necesidad de rescatar el concepto del socialismo indovenezolano, "debemos buscar esos conceptos en las raíces de los indígenas y que todos los venezolanos seamos partícipes de la solidaridad, la convivencia y la lucha".
Recalca que las leyes orgánicas de Educación y de Educación Universitaria deben contemplar el rescate de esta memoria histórica a través, por ejemplo, de la enseñanza de un idioma originario, así como dentro del pénsum de estudio considerar no sólo la historia de la independencia, sino a más profundidad la de la resistencia a partir de la llegada de Cristóbal Colón al continente, aparte de refrescar la memoria histórica de los caciques y cacicas, "es el momento oportuno de asumir esto como un compromiso patrio".
Museo etnográfico, una idea hecha proyecto
El presidente del PIA-GPV informó que está en proyecto la construcción de un museo etnográfico en Venezuela, en un terreno en Macuto, estado Vargas, como parte de la avanzada por afianzar raíces indovenezolanas.
"Será toda una diversidad cultural. La maqueta la realizó el arquitecto Fruto Vivas y actualmente estamos en la etapa de adaptar el plano de la maqueta al plano del terreno. El museo contempla salas audiovisuales, así como una sala dedicada a América que recoja manifestaciones de originarios ecuatorianos, colombianos, bolivianos, entre otros, como un mencanismo de integración", explica.
Maruja Quimbo, indígena quechua ecuatoriana, quien vive en Venezuela, manifiesta sentirse orgullosa de sus raíces y más contenta aún de poder mostrar su trabajo como artesana a los indígenas venezolanos, "porque somos como hermanos".
Amanda Winare, ciudadana indígena del Amazonas, llama a preservar la cultura y la naturaleza, "el mejor legado que ha dejado el indígena al mundo".
Dentro de la conmemoración, y en agradecimiento al comandante eterno por su lucha indigenista, este sábado, a las 8:00 de la mañana, un grupo de chamanes se hará presente en el Cuartel de la Montaña, parroquia 23 de Enero, Caracas, para realizar una invocación a la naturaleza y reafirmar ante el lecho de descanso del líder supremo el juramento de los ancestrales de ser leales y fieles al legado de Hugo Chávez.
Prensa AVN
.JPG)
0 Comentarios:
Publicar un comentario