Policía del Zulia retoma su compromiso social

Con un nuevo estatus de seguridad ciudadana se levanta esta semana la Policía Regional del estado Zulia, un organismo que había sido denunciado por las bases sociales por su falta de apoyo a las comunidades y por la inadecuada utilización de la fuerza y las armas.

La reestructuración de este cuerpo policial comenzó con la firma del decreto número 127 por parte del gobernador del Zulia, Francisco Arias Cárdenas, quien reconoció la necesidad de depurar el organismo para adaptarlo al estatus de la Policía Nacional.

"La Guardia del Pueblo y la Policía Nacional ya se perciben en las calles. Esta acción debe ser ejemplo para la nueva Policía Regional del estado Zulia, un organismo que va a ser restaurado en beneficio de la ciudadanía", precisó.

Como parte del cambio, se incorporaron nuevas unidades, se dotó de chalecos antibalas y radiotransmisores, además de que se le aplica exámenes físicos y psicológicos a los 6.220 funcionarios activos.

Biagio Parisi, coordinador de modernización y capacitación de la policía regional, destacó que en las primeras pruebas realizadas se han encontrado problemas cardiovasculares a 20% de los funcionarios.

Exámenes de rayos X, pruebas de laboratorio y de sangre, exámenes psicotécnicos y evaluaciones en la utilización de armas son algunos de los otros estudios que deberán aprobar los funcionarios.

"No conocen con detalles el espectro del uso de la fuerza, tienen debilidades fortísimas en el área de supervisión; por eso no me atrevo a enviar a alguien en la calle así, sin antes revisar, en eso seremos muy rigurosos porque es un riesgo tanto para el funcionario como para la ciudadanía darle a ellos las herramientas y que no las sepan usar", expresó.

Cuadriplicar la presencia policial es un reto para las nuevas autoridades locales, una solicitud que las comunidades demandaban desde hace varios años.

Norberto Quintero, del sector Panamericano, hizo hincapié en las fallas que el cuerpo de seguridad tenía: "Para nadie es un secreto que muchos de estos funcionarios les cobraban a los propios delincuentes para no ajustarlos a la ley, malandros con chapas, como les decimos aquí. Ahora nos están devolviendo la confianza y estamos seguros que todos ellos van a caer por su propio peso".

Estos ajustes que se gestan en la policía del estado comenzaron a favorecer a la población, resaltó Blanca Inés Bustillos, de la comunidad de La Floresta. Destacó que desde la llegada de la Policía Nacional los índices delictivos han disminuido.

"Se han espantado los malandros. Definitivamente aquí lo que faltaba era mano dura. El Zulia estaba desprotegido y este cambio lo celebramos todos. Al zuliano hay que demostrarle con hechos, con acciones, porque las palabras bonitas aquí no funcionan y estamos viendo resultados positivos", indicó Bustillos.

AVN Prensa